Foto: Esneyder Gutiérrez Cardona
El presidente de UNE aseguró que desde su llegada a la compañía ordenó una auditoría interna para comprobar cualquier irregularidad. |
Tras iniciar una auditoría especial al departamento de gestión del Talento Humano de UNE EPM Telecomunicaciones desde el pasado mes de julio, el contralor General de Medellín, Juan Carlos Peláez Serna, notificó el hallazgo de un presunto detrimento patrimonial por más de 4.000 millones de pesos.
El informe realizado por el Grupo Especial de Reacción Inmediata (Geri) de la Contraloría, analiza el período comprendido entre 2007 y el primer trimestre de este año, mostrando además del presunto detrimento, siete deficiencias fiscales y administrativas, lo cual coincide con las denuncias hechas al respecto, por el actual presidente del Concejo, Bernardo Alejandro Guerra.
Según la Contraloría, entre las inconsistencias halladas, la más grave se relaciona con un presunto detrimento patrimonial, valorado en 4.782 millones de pesos sustentados en pagos de bonificaciones a 168 personas, por “supresión de cargos por reestructuración, procesos de fusión con otras empresas y plan de retiro voluntario para pensionados en situación de reserva”.
Por otra parte, el informe asegura que se constató el pago de una bonificación de más de $32 millones por la supresión del cargo de un funcionario que efectivamente no fue suprimido. Además, en otro caso, un empleado recibió sin justificación alguna, 1.489.844 pesos “equivalente a una semana de salario” y otro, el pago de una bonificación por transacción laboral, por $22.251.705 pese a haber renunciado.
Al respecto, el presidente de UNE, Marc Eichmann, aclaró que todas estas bonificaciones se dieron en la administración anterior y enfatizó que en la actual, “no se ha indemnizado a absolutamente a nadie”.
Eichmann explicó que la Vicepresidencia de Recursos Humanos hizo una revisión junto a la Contraloría, para explicar lo que había pasado y cómo es que se habían dado esas indemnizaciones y “digamos que la Contraloría no quedó absolutamente convencida y decidió abrir unas investigaciones, las cuales decidirán si hubo de alguna manera una falla disciplinaria o un problema por parte de la administración”.
Finalmente el directivo recordó que lo primero que hizo al entrar a UNE, fue pedirle a Auditoría Interna “que hiciera una revisión del tema de directivos, a ver si había un problema y a raíz de eso descubrimos gente que no tenía papeles y nosotros mismos pedimos una auditoría especial a la Contraloría con respecto al tema de recursos humanos”.
La Contraloría aseguró que UNE “no logró demostrar el costo beneficio del pago de las bonificaciones mencionadas, afectando la situación administrativa y financiera de la empresa, evidenciándose un incremento significativo de los gastos de nómina y un incremento mínimo en los ingresos operacionales”.
Por eso, se conoció que de encontrarse las fallas anunciadas, se suscribirán acuerdos de gestión entre el ente auditado y la Contraloría General de Medellín, para aplicar los correctivos del caso.
Entre tanto, el contralor Peláez Serna manifestó que los hallazgos fiscales iniciarán su trámite en la Oficina de Responsabilidad Fiscal, de acuerdo con lo establecido por la ley para determinar las responsabilidades pertinentes.