Columnistas

Honor a Juli醤 P閞ez Medina
Autor: Iv醤 Guzm醤 L髉ez
22 de Julio de 2014


Recordando el deterioro de la salud de nuestro colega, el periodista Juli醤 P閞ez Medina, me di a la deliciosa tarea de releer dos de sus catorce libros, publicados a lo largo de su vida...

2

Ivanguzman790@gmail.com


Recordando el deterioro de la salud de nuestro colega, el periodista Julián  Pérez Medina, me di a la deliciosa tarea de releer dos de sus catorce libros, publicados a lo largo de su vida: Cuentos del ocio (mayo, 1978), y  Cuentos Insustanciales (Teoría del color, mayo, 1990). Observando las fechas de publicación, me acordé de los versos del poeta español  Felipe Camino Galicia de la Rosa, más conocido como León Felipe,  aplicables también, cómo no,  a los libros que salen de la tibia imprenta, y que caen por igual al buido esclarecimiento de los buenos lectores o a la germanía de algunos “críticos literarios” que no pasan de simples picajones, colados en las páginas de algunos periódicos y revistas de escasa monta. Dice León Felipe: “¡Oh, pobres versos míos.../ hijos de mi corazón / que os vais ahora solos / y a la aventura por el mundo.../ que os guíe Dios! Por su parte, el autor, en el prólogo a Cuentos del ocio, dice: “Insisto en escribir sin adornos, con naturalidad, casi con humildad. Por eso presento todas las situaciones de los cuentos con la intrascendencia que les quiero dar a todos ellos”. Sin duda, los cuentos de Julián, verdaderos hijos de su corazón, escritos con naturalidad y frescura, no necesitaron de la guía de Dios. Ellos se han defendido solos, prueba irrefutables de su valor literario, estético y sociológico. Y ello hace grande al periodista, que con su cosecha de doce más, aparte de los dos o tres, que creo, están inéditos, nos sigue dando ejemplo (ahora desde su lecho de enfermo), de su maestría periodística y literaria, que por demás, no es bastante en nuestro medio.


De la obra literaria de Julián Pérez Medina, en especial de sus cuentos, hay que decir que son ramilletes de vivencias, transustanciadas cuidadosamente por el alma noble, por el periodista y el escritor, que sabe extraer de las cosas sencillas, anodinas en algunos casos, la belleza que guardan, para entregarlas como un regalo precioso a los verdaderos lectores. Muestra palmaria del aserto anterior, son sus cuentos: Por el color de la piel, ganador del primer puesto en el concurso de poesía y cuento de la Universidad Cooperativa de Colombia, año 1989, y La profesora de español, verdadera lección de amor a nuestras maestras y maestros, y clara muestra de respeto por el idioma y el arte de escribir. 


En, Cuentos Insustanciales, a manera de prólogo, escribe el maestro Juan Roca Lemus, Rubayata: “Ni muy alto, ni muy bajo, ni muy mediano -¿entonces qué?-, a ratos lánguido y siempre el rostro de color seudoacamellado, da la impresión de ser demasiado malicioso, este periodista vocacional llegado al tope de lo profesional, parado firmemente en la ética. Sus experiencias en su correría larga –siendo joven– en redacciones de prensa y en cabinas radiales, le dieron una experiencia tal, en el conocimiento de la gente, que embebió en lo sicológico”. (…) “Y “resultó” cuentista. Escritor de cuentos, sin posar de Carrasquilla, ni Efe Gómez, que hicieron escuela. Pero, donde pone el ojo, coloca la bala: se va a lo medular, a lo sicológico, y acierta. Ha escrito varios libros de diversos matices en lo temático, siempre parado en su pedestal de periodista y con referencia a nuestra profesión”. Estas palabras, escritas en 1979, tienen plena vigencia hoy, y son una radiografía de la vida y el trabajo de nuestro colega.


Ahora, cuando los años se le juntaron y los males del cuerpo no le permiten ganar la calle y menos la noche, otrora plácidas y seguras; ahora, cuando ya no puede contar larga y morosamente a sus amigos sus aventuras, dichas, desdichas y logros; ahora, cuando sólo cuenta con la compañía de sus hijos y de su otredad, ahora queremos decirle ¡Gracias Julián, gracias amigo, gracias colega!, porque tu vida y tus libros y tus espacios radiales y tu academia, siguen presentes en la pluma, y en la voz, y en el corazón de los que continuamos con tu verdadero amor: el periodismo.


Puntada final: El municipio de Liborina, y muy especialmente su corregimiento El Carmen de la Venta, está muy reconocido por el acompañamiento del Periódico EL MUNDO, en la pasada celebración de su centenario. Cumplo con la embajada, y digo ¡Gracias! Nuestras comunidades se sienten fortalecidas cuando la prensa está presente. 




Comentarios
2
gustavo
2014/07/22 12:27:17 pm
Profesor, compa馿ro, colega y ciudadano Juli醤 P閞ez le rogamos al Creador por su salud; aunque no nos recuerde o no nos conozca, muchos de sus disc韕ulos directos e indirectos atendemos su gu韆, como profesionales de la comunicaci髇 o como personas.
Pablo
2014/07/22 08:02:44 am
Saludo y gratitud al periodista y profesor universitario. Hombres de sabios concejos y brillantes ideas liberales que han aportado a la formaci髇 de profesionales en las diferentes 醨eas del conocimiento. Reciba un abrazo de gratitud MAESTRO.