Desde el 3 hasta el 7 de abril se llevará a cabo en Medellín, el Oriente antioqueño, Bogotá, Bucaramanga y Cali, la Semana por el Derecho a la Salud, a cargo de la Alianza Somos 14 más 1, y en la que también participan diez universidades y cinco asociaciones de pacientes.
En las actividades programadas, que se encuentran en el marco del Día Mundial de la Salud que se conmemora el 7 de abril, se podrá participar en en siete foros académicos, una firmatón de estudiantes y una twitteratón, que permitirán a los ciudadanos reflexionar acerca de las consecuencias de la crisis del sistema de salud en el país.
Asimismo, se alertará al Gobierno Nacional sobre las repercusiones de la situación financiera de los hospitales y clínicas por las deudas de algunas EPS, lo que afecta la atención de los pacientes.
Más de 1.500 personas participarán en los foros, donde se analizarán y discutirán temas como la crisis del sector salud en Colombia, el derecho a la salud y la Ley Estatutaria.

Hacia la reflexión
Juan Édgar Marín Restrepo, gerente de Servicios y vocero de la Alianza Somos 14 más 1, explicó que durante la Semana por el Derecho a la Salud se pretende elevar “una gran reflexión acerca de la problemática de salud que estamos viviendo, lo que es muy importante porque nos estamos uniendo los usuarios, las sociedades científicas y la academia con las universidades para replantear algunas formas de este modelo de salud”.
De estas jornadas saldrán sugerencias para llevar al Gobierno Nacional porque “esto está funcionando muy mal en salud y esta disfunción está afectando a la comunidad”, especificó.
El principal problema, resaltó, es que no se cuenta con un adecuado flujo de recursos, y sin éstos “las cosas no funcionan porque no hay insumos adecuados, los recursos humanos permanentemente están flotando, renuncian de unos hospitales para irse hacia otros”.

Ya no quieren estudiar Ciencias de la Salud
León Denis Velosa Castro, director de la Facultad de Enfermería de la Universidad Pontificia Bolivariana y decano (e) de la Facultad de Ciencias de la Salud, resaltó que es necesario “articularse para mostrar las deficiencias y problemáticas que se tienen en el sector salud en el ámbito nacional”.
Por otro lado, mencionó que están disminuyendo los interesados en profesionalizarse para pertenecer al gremio, pues “el público en general, los muchachos, no se están animando a estudiar salud, porque lo primero que le dicen a uno es ‘¿para qué estudio eso si salgo a pelear con el medio, como están peleando ustedes?’”
Añadió que no hay “posibilidades de hacer prácticas en experiencia de salud. Si un estudiante de Enfermería va a ir a administrar un medicamento, porque tiene que adquirir esa competencia y no tiene los recursos, no tiene los medicamentos, queda perdido y no pudo lograr esa competencia”.
Por eso, explicó, dentro de las actividades programadas se realizará en el campus de Laureles la Firmatón el miércoles, de once de la mañana a una de la tarde, a lo que se suma un muro, donde los estudiantes, docentes y las personas en general podrán plasmar sus críticas y aportes respecto a la problemática.
“Más que recoger firmas, lo que se busca es que las personas se concienticen de que el sector salud está en crisis y que esto es algo que nos está afectando a todos”, dijo.

“Muchos se quedan sin atención”
Gustavo Adolfo Campillo Orozco, presidente de la fundación Red de Apoyo Social de Antioquia (Rasa), aseguró que al final de la cadena de salud quien se ve afectado es el paciente, porque “si no hay capacidad de resolución en toda la estructura del sistema, el paciente no va a acceder a los servicios de salud”.
De esta manera “estamos teniendo miles de pacientes con patologías crónicas, como cáncer, problemas renales, VIH, también de sistema nervioso central y salud mental sin atención, poniendo en riesgo su vida y su integridad física”, afirmó.
“Yo lo que considero es que el sistema tiene que pensarse y repensarse sin la estructura de la intermediación, donde la gestión del riesgo está a cargo de una aseguradora, que se la está trasladando es a un prestador de servicios. Si esa gestión del riesgo no se ejecuta de manera adecuada en ese intermediador, ¿para qué necesitamos a ese intermediador?”, por lo que opinó que lo ideal sería “que las cuentas del sistema no pasaran por tantas manos”.

Ilegalidad laboral
Jorge Iván Posada, médico adscrito a Metrosalud desde hace 19 años y miembro de la Junta Directiva de la Asociación Médica Sindical Colombiana (Asmedas) seccional Antioquia, enfatizó en que la principal problemática que sufre actualmente el sector de la salud se debe a la grave crisis que se presenta en el régimen subsidiado y también el contributivo.
Por este motivo, todos los prestadores del servicio, señaló, deben enfrentar desabastecimiento en las farmacias, laboratorios, e incluso, en sus implementos de aseo.
Para él, uno de los casos puntuales a resaltar en medio de la problemática del sector, se sufre en la E.S.E. Marco Fidel Suárez, del municipio de Bello, donde el personal adscrito lleva varios meses sin recibir su salario.
“Los compañeros están siendo contratados de una manera ilegal, en condiciones indignas porque no tienen estabilidad laboral ni gozan de todas las prestaciones sociales”.
Aclaró el médico, que los profesionales de la salud no cuentan con las garantías laborales necesarias porque se les contrata mediante falsos sindicatos que en realidad “son tercerizadores de la mano de obra”, por lo que no se les respetan sus derechos, como ocurre en el caso de las vacaciones.

“Hay dinero pero no apoyo”
Posada señaló que pese al buen momento por el que pasa financieramente la Alcaldía de Medellín, no se apoya como se debería a Metrosalud.
“Si bien, a finales del año pasado Metrosalud recibió unos recursos por parte de la Alcaldía, estos fueron en calidad de anticipo de unas obligaciones que debía cubrir la Administración Municipal para este año y los dio al cierre de 2016”.
“Todos nos enteramos de las noticias en las cuales el alcalde mencionaba que el año pasado se presentó un superavit por 230.000 millones de pesos y además esperan recursos por un billón de pesos de las transferencias de EPM. A pesar de esa situación, la Municipalidad ha sido indolente con las necesidades de Metrosalud y con las necesidades de salud de la población más pobre y vulnerable, que es la que atiende Metrosalud”, opinó.
Aunque la Administración ve “la condición financiera tan dramática por la que atraviesa Metrosalud, esa situación de iliquidez a la que la ha llevado el principal pagador que es Savia Salud, no acude en su ayuda desde el punto de vista financiero”, recalcó.

¿Para qué ha servido la Ley Estatutaria?
La Ley 1751, mejor conocida como Ley Estatutaria de Salud (LES), fue firmada por el presidente Juan Manuel Santos el 16 de febrero de 2015.
Fue la primera vez en Colombia que se reglamentó un derecho fundamental, desde la Constitución de 1991, y que en este caso correspondió a la salud.
Después de cumplirse un poco más de dos años de firmar la LES, el médico Jorge Iván Posada dijo que “la Ley Estatutaria de Salud es una contribución importante para garantizar el derecho universal a la salud, sin embargo, su implementación ha sido muy lenta; y en segundo lugar, el Estado colombiano no ha provisto los recursos necesarios para su total implementación, porque la extensión de los servicios a los usuarios se traduce en mayores costos para la atención y en una necesidad de mayores recursos”.
Sin embargo, aclaró que opina que en principio es una situación muy beneficiosa “que contribuye al desarrollo de ese principio del derecho fundamental a la salud”.
“Las comunidades, el personal asistencial, el gremio médico, los pacientes, las ligas de usuarios, todos tenemos que levantar la voz para exigir un respeto y un cumplimiento de los derechos que están garantizados en la Ley Estatutaria”, opinó.
En ese mismo sentido, el gerente de Servicios y vocero de la Alianza Somos 14 más 1, Juan Édgar Marín Restrepo, dijo que la Ley Estatutaria es un avance importante desde lo social para todos los colombianos, pero esta Ley, sin recursos, no deja de ser una mera ilusión”.
Para Ricardo Castrillón, gerente de Salud Pública de la Gobernación de Antioquia, quien también expresó una opinión acerca de la implementación de la LES, ésta “en lo que más beneficia al sistema como tal es que la salud queda como un derecho fundamental. El problema de eso es que no estábamos preparados para las nuevas tecnologías en salud, que están avanzando a un paso agigantado; y si éstas siguen apareciendo no va a haber con qué sostenerlas”.

En Antioquia
El gerente de Salud Pública de la Gobernación indicó que dar esa categoría de derecho fundamental a la salud, es el aporte más grande de la Ley Estatutaria, por lo que desde la Gobernación de Antioquia se vienen implementando “dos modelos diferentes, que desde el Ministerio nos han apoyado”.
“El primero es el Modelo Integral de Atención en Salud, que es lo que hemos conocido como Mias, que genera las rutas integrales de atención en salud. Así, la idea es que cuando una persona se enferme, en una situación específica, el modelo diga de dónde a dónde debe pasar y la ruta nos diga si hay un atraso, cada cuánto se requieren los exámenes y cada cuánto las intervenciones, y así desde la Gobernación poder vigilar las redes”, señaló.
“Si una persona se enferma y necesita una intervención en un nivel superior, la red, de acuerdo a la ruta, dice a dónde lo deben remitir y no esperar a ver dónde lo reciben”.
“Para este año tenemos ya el borrador de las dos primeras, que sería la de maternidad segura para cuidar las maternas del Departamento, y la de promoción y prevención, que es todo el tema de mantenimiento y el autocuidado en la salud”.
Castrillón aclaró que “ya no hay un Plan Obligatorio de Salud (POS) sino que se van a respetar inicialmente las guías y los protocolos de manejo pero igual se respetan las rutas que se van generando. A medida que se van generando estas rutas, van desapareciendo las otras guías que existían para empezar a implementar las nuevas, que todas tienen un sustento científico comprobado”.
Por otro lado, “si hablamos de aseguramiento, en el departamento nosotros tenemos los recursos suficientes para tener una cobertura universal, y digamos que esa es la puerta de entrada al sistema. Antioquia tiene más del 95% de los antioqueños asegurados, por lo que podemos hablar de unas 200.000 a 250.000 personas sin asegurar. El resto está asegurado, lo que significa que se encuentra en el régimen contributivo, subsidiado o un régimen especial”.
Aclaró el funcionario que en este aspecto Antioquia no tiene ningún problema de presupuesto, “porque el Departamento aporta con rentas debidas un buen monto de recursos”, sin embargo, “en el segundo momento, que es la prestación del servicio, sí tenemos grandes dificultades en Antioquia”.
Estas son las consecuencias de “la disminución de los recursos del sistema general de participaciones para pagar a la población pobre no asegurada, que desde hace tres años han venido disminuyendo: de 140.000 millones que recibíamos, hoy estamos recibiendo 37.000 a 40.000”.
Añadió que “lo segundo son los medicamentos que estaban por fuera del POS, lo que llamamos el recobro de lo no POS. Sólo en las dos anteriores situaciones nosotros como Dirección Seccional podríamos estar debiendo a nuestros prestadores alrededor de unos 340.000 millones de pesos. Aquí sí tenemos dificultades serias en lo que tiene que ver con la prestación de los servicios”.

La depresión, temática de la OMS
El tema de la campaña para el Día Mundial de la Salud de 2017, cuando se conmemora el aniversario de la Organización Mundial de la Salud, es la depresión.
De acuerdo con León Denis Velosa Castro, director de la Facultad de Enfermería de la Universidad Pontificia Bolivariana y decano (e) de la Facultad de Ciencias de la Salud, actualmente se evidencia un alto porcentaje de personas afectadas por depresión, lo que obedece, entre otros factores, a las condiciones socioeconómicas y de seguridad del país.
La psicóloga Yenny Urrea, del Centro de Familia de la UPB, explicó que “la depresión es un trastorno del estado de ánimo que afecta todas las esferas de la persona que lo padece”, que puede afectar a las personas sin importar su edad y que los síntomas pueden ser estado de ánimo bajo, y en algunos casos irritabilidad o enojo constante, así como un sentimiento de vacío “y de imposibilidad de disfrute de las actividades que antes resultaban placenteras”.
“La depresión puede llevar a un alto riesgo suicida en muchos casos, que se ve como  una resolución ante la imposibilidad de resolver y al incremento de las dificultades. También puede generar dependencia a alcohol o sustancias psicoactivas, también puede conllevar a la deserción académica, laboral y rupturas afectivas que lo que hacen es agravar los síntomas depresivos”, añadió.
La psicóloga aclaró que, en general, a este trastorno puede dársele tratamiento farmacológico y psicoterapéutico, pero en algunos casos la combinación de ambos suele ser más efectiva. “Lo fundamental en estos casos siempre es la busqueda de ayuda profesional, no automedicarse y rodearse de personas que acompañen y apoyen este proceso”, recalcó la profesional.