La ONU dijo que los refugiados burundeses que murieron durante una manifestación reprimida ayer, viernes, por el Ejército de la República Democrática del Congo (RCD) son treinta o más, además de un centenar de heridos que provocó esa acción.

"Aunque las circunstancias precisas no están claras, las informaciones indican que durante una confrontación con manifestantes burundeses, las fuerzas de seguridad congolesas abrieron fuego contra la multitud", indicó la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) mediante un comunicado.

Estos hechos se registraron el viernes en Kamanyola, en la provincia de Kivu del Sur (RDC), cuando un numeroso grupo de refugiados y solicitantes de asilo se reunió para exigir la libertad de compatriotas detenidos por la supuesta fabricación de armas.

El Acnur pidió una investigación de estos trágicos hechos.

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Por el momento, el organismo y las organizaciones con las que colabora en el terreno han enviado a Kamanyola equipos de ayuda, incluido personal médico para tratar a los heridos.

Kamanyola alberga más de 2.000 refugiados de Burundi, de los cuales la mayoría han llegado a ese emplazamiento a partir de abril de 2005 a causa de la violencia política que estalló con el anuncio del presidente  Pierre Nkurunziza de que se presentaría a un tercer mandato consecutivo.

Desde entonces, las elecciones presidenciales se han mantenido en suspenso y no hay fecha prevista para su realización.

Actualmente, la RDC alberga cerca de 44.000 refugiados de la vecina Burundi.