Macron, que venía de una tendencia a la baja desde la semana pasada, aumentó 4,5 puntos porcentuales desde que el pasado miércoles obtuvo el respaldo de Bayrou, para situarse en el 23,5 %, por debajo de la ultraderechista Marine Le Pen (26 %) y por delante de candidato de la derecha, François Fillon (20,5 %).

Según el sondeo de Ifop-Fiducial, Macron atrae a una gran parte del electorado de Bayrou, quien fue candidato presidencial en 2002, 2007 y 2012, al igual que Fillon, aunque en menor grado, mientras que Le Pen pierde medio punto porcentual.

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Si los resultados de la primera vuelta del 23 de abril fuesen parecidos a los del sondeo de hoy, Le Pen, eurófoba, y Macron, proeuropeísta, disputarían la segunda y definitiva vuelta del 7 de mayo, con ventaja para éste último, que obtendría el 61,5 % de los sufragios, un 0,5 % más que en el anterior sondeo, frente al 39 % de la líder ultraderechista.

Quedaría eliminado en primera ronda Fillon, a pesar de su notable recuperación después del golpe que supuso a finales de enero la investigación de una posible malversación de fondos públicos en la contratación de familiares.

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Entre los otros principales aspirantes franceses, el socialista Benoît Hamon, que acaba de forjar una alianza con el ecologista Yannick Jadot, y el neocomunista Jean-Luc Mélenchon tienen una intención de voto del 13 % y del 11 %, respectivamente.

El sondeo de Ifop-Fiducial registra una baja participación en las elecciones, en torno al 60 %, muy por debajo de los tres últimos comicios (72,8 % en 2002, 85,3 % en 2007 y 81,4 % en 2012).