Investigadores de la Universidad de Medellín han llevado a cabo una investigación sobre las nuevas formas de consumo de la literatura, mediante una indagación profunda sobre la producción de los llamados “libros electrónicos”, los cuales están tomando auge en esta nueva era virtual.

Este proyecto buscó indagar y explorar los retos que desde la comunicación y la gestión del conocimiento se abordan con respecto a la producción de libros electrónicos, los cuales han llegado al mercado en distintos formatos, ofreciendo posibilidades que se enfocan hacia la convergencia de los medios de comunicación y a los nuevos hábitos de consumo que ofrece la internet y el creciente uso de los dispositivos móviles.
 
María Isabel Zapata Cárdenas y Carlos Alberto Galvis Ortiz, docentes – investigadores de la Universidad de Medellín encontraron en esta tendencia actual la oportunidad de evaluar y conocer las necesidades y experiencias de los llamados e-lectores (lectores de libros electrónicos), como usuarios finales de esta nueva herramienta.
 
“Pensar en el libro digital, es un salto que no sólo involucra avances tecnológicos. Su gran efecto y riqueza está en la posibilidad de alinearlo con procesos de inclusión, estudio y trabajo ciudadano, donde la tecnología sea una herramienta de mediación al servicio de los cambios sociales y de las necesidades de grupos humanos, que ven en la tecnología no solo un instrumento de vanguardia, sino un elemento de transformación humana que les posibilita mayor conocimiento, interactividad, nuevos formatos, distribución de la información a menor costo y exploración de la herramienta en sí”, dice al respecto de esta nueva posibilidad de consumo virtual María Isabel Zapata Cárdenas, docente de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Medellín.

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La investigación encontró que la mayor producción de libros virtuales son el resultado de la migración de títulos impresos en papel hacia su versión digital, sin embargo, frente a la situación de cómo incentivar y asumir el reto de generar una cultura no sólo de consumo sino de producción del libro digital, entidades del sector editorial presentan en sus sitios web cifras importantes para el sector de los libros electrónicos: Norma S. A. (hoy Carvajal Educación S.A.S.) publica en su sitio web 537 títulos en formato electrónico, Editorial Planeta Colombiana S. A. unas 331 publicaciones y Librería de la U, uno de los más grandes proveedores en estos formatos, asciende a 16 mil títulos.
 
Es importante resaltar que mediante una encuesta se encontró que en Colombia el 69.8% del público no sabe qué es un libro electrónico. Este resultado puede explicarse desde dos premisas básicas: la primera tiene relación con el analfabetismo digital que sufre el País y la segunda tiene que ver con el hecho de que existe una porción alta de la población nacional que no cuenta con computador y/o conexión a internet.

El consumo de literatura en versión digital propone distintos retos que podrían incluirse en el Plan Nacional de Apropiación y Vinculación de las TIC, liderado por el Gobierno Nacional, teniendo en cuenta las características propias del libro virtual, entre las cuales podemos encontrar la posibilidad de un acceso inmediato a su contenido, un mayor alcance en cuanto la cobertura del territorio nacional y la posibilidad de portarle en dispositivos móviles, tabletas y computadores.