Colombiacracia es una plataforma digital que permite que los ciudadanos escojan entre diferentes propuestas para elaborar una lista de lo que la sociedad civil considera prioritario. Si bien estos resultados nutren el debate democrático, es importante tener en cuenta que no es una encuesta representativa de la población.
Las dinámicas sociales han cambiado tras la revolución digital y la llegada de las redes sociales, pero las instituciones democráticas y la manera como la ciudadanía decide ha tenido pocos cambios. Colombiacracia es una plataforma experimental que nace como un proceso democrático para hacer que las voces de la ciudadanía sean escuchadas.
Se trata de una plataforma digital que busca que los colombianos expresen cuáles son para ellos las prioridades sociales, según explicó Sebastián Espejo, biólogo de la Universidad de Antioquia y voluntario del proyecto Colombiacracia.
Esta plataforma nace en un contexto de descontento social. Según explicó Espejo, pretende recoger información sobre demandas sociales y su aceptación en los miembros de la sociedad civil con el objetivo de que sean tenidas en cuenta en debate y a la hora de la toma de decisiones. Colombiacracia.org es la cuarta plataforma en su estilo, después de chilecracia.org, lebanocracia.org y georgiacracia.org.
En principio el mecanismo de participación es sencillo, se trata de elegir entre parejas de propuestas aleatorias y unos algoritmos ranquean estas propuestas como prioridades dependiendo de la elección de las personas.
Si bien el proyecto Chilecracia, en el cual se basa Colombiacracia, ha sido criticado por obligar a las personas a elegir entre dos opciones, muchas veces de igual importancia, Espejo explicó que las alternativas no son excluyentes y este modelo estadísticamente funciona debido a que son muchas las personas que votan y una persona puede votar muchas veces.
Otra crítica que ha tenido el proyecto en Chile es que se detectaron bots en la votación lo cual desvirtúa los resultados. Análisis como el de la empresa ConnectaLabs muestra esto, además que, tras el análisis de los datos, afirman que existe sesgo en ciertos temas. Los organizadores de la plataforma han implementado diferentes medidas de protección para evitar la participación de bots.
La plataforma inició su funcionamiento el martes 3 de diciembre con 100 propuestas. Según los creadores del proyecto, estas ideas se recolectaron de fuentes de información de diferentes orientaciones políticas. También se incluyeron diferentes organizaciones políticas y sociales, medios de comunicación y expresiones individuales en las redes sociales.
“Las propuestas fueron escogidas por ciudadanos colombianos”, indicó Espejo y explicó que fueron recolectadas por el grupo de voluntarios que están trabajando en la plataforma.
Wilmar Giraldo, director ejecutivo de la Corporación Libertad y Democracia, señaló que hay que ser cuidadosos con qué se pregunta, ya que la formulación de preguntas tendenciosos hace que no hayan resultados confiables y se desvirtúe la plataforma.
Desde el 15 de diciembre, las propuestas que se agregan a Colombiacracia provienen de sugerencias que la ciudadanía envía a través del buzón de propuestas del sitio web. “Contamos con un equipo dedicado a temáticas de política pública, provenientes de distintos sectores y tendencias políticas, que verifican y seleccionan las propuestas a incluir cada semana”, se indica en la plataforma.
Giraldo indicó que este tipo de procesos son importantes porque son herramientas que brindan nuevos elementos al debate, pero aclaró que hay que ser cuidadosos con la información obtenida.
“Vemos en este tipo de procesos muchas fortalezas, pero también debilidades, no se puede basar solamente en procesos tecnológicos, hay que tener procesos análogos, hay que llegar a las comunidades, saber que el campo se comunica diferente a las ciudades, que hay lugares en Colombia que no tienen acceso a internet aún”, aseveró Giraldo.
Y es que los datos obtenidos en esta plataforma no son representativos de la sociedad, ya que las poblaciones que acceden a internet y a este tipo de plataformas no representan a la distribución demográfica del país.
Por ello, los organizadores de Colombiacracia aclaran que “este es un sistema experimental de ranqueo de preferencias dirigido abiertamente a quienes quieran participar (muestreo no probabilístico). La recolección de datos en línea mediante un método autoselectivo tiene un sesgo inherente a los usuarios de internet que deciden participar. Es por esto que los resultados de Colombiacracia no pueden considerarse como representativos de la población”.
Giraldo concluyó que no se deben tomar los resultados de este proceso como “el absoluto clamor de la ciudadanía sino una herramienta para el debate, siempre teniendo en claro quiénes participaron en el proceso”.
Según sus promotores, Colombiacracia no está afiliado a ningún partido político ni a mecanismos gubernamentales de participación. La promoción de la plataforma en Colombia funciona con ciudadanos voluntarios, pero los algoritmos detrás del sistema son provistos por la empresa Datawheel, empresa del físico chileno César Hidalgo. Espejo explicó que este proyecto carece de ánimo de lucro. Los datos de Colombiacracia serán puestos a disposición del público y estarán accesibles para quien quiera utilizarlos.
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