El secuestrador asesinó a tres rehenes en una casa de veteranos de guerra y después fue abatido por las autoridades.
Los tiroteos siguen siendo un gran problema en Estados Unidos.
Con un saldo fatal de tres rehenes asesinadas y el secuestrador abatido, terminó la toma de rehenes ocurrida este sábado en una residencia militar de California.
Las tres rehenes asesinadas eran trabajadoras de la residencia militar privada para excombatientes de las guerras de Irak y Afganistán con trastornos postraumáticos llamada The Pathway Home y ubicada en Yountville, al norte de San Francisco.
"Esta es una noticia trágica, una que esperábamos no tener que dar", dijo en una comparecencia el capitán Chris Childs, de la Policía del estado de California.
Los primeros agentes que llegaron al lugar intercambiaron disparos con el secuestrador, lo que según Childs evitó que saliera "a buscar otras víctimas".
Aunque las autoridades no revelaron la identidad del asaltante, el senador californiano Bill Dodd dijo a medios locales que se trataba de un excombatiente con problemas psicológicos que a principios de semana le habían pedido abandonar la residencia.
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