Los responsables de construir el parque biblioteca España y los organismos de control están en deuda con la ciudadanía. Pasados cuatro años de descubrimiento de sus fallas, no hay explicaciones creíbles sobre las causas de costosos daños.
Los responsables de construir el parque biblioteca España y los organismos de control están en deuda con la ciudadanía. Pasados cuatro años de descubrimiento de sus fallas, no hay explicaciones creíbles sobre las causas de costosos daños.
También es notoria la falta de voluntad de rendir cuentas por las actuaciones del equipo responsable del proyecto.
Reclamar claridad no es cazar brujas. Y, a menos que se demuestre, no es hablar de corrupción.
Es buscar entender causas y exigir, como tiene que ocurrir, resarcimiento al Estado, que ha cargado con las consecuencias de los errores. Responder es deber ético de quienes asumen compromisos con la transparencia.