La misión fue solicitada por el Ministerio de Medio Ambiente, para obtener una mirada independiente acerca de los daños ambientales ocurridos por el afloramiento de crudo en el pozo Lizama 158, en Santander.
En Colombia ya está lista la misión de la ONU Medio Ambiente y de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (Ocha), quienes evaluarán el impacto ambiental y humanitario que tuvo el derrame de petróleo del pozo La Lizama 158, en Santander.
Según el ministro de Medio Ambiente, Luis Gilberto Murillo, la misión no solo busca determinar los daños ambientales, sino también dar recomendaciones para la recuperación de los ecosistemas y las comunidades.
El informe estará compuesto por cuatro temas específicos. El primero, será la evaluación del daño ambiental; el segundo, una revisión de la respuesta de las autoridades y unas recomendaciones para mejorarla en el futuro; tercero, unos los lineamientos para el plan de restauración; y cuarto, “un acompañamiento a las mejoras en capacidad institucional”, señala el ministro Murillo.
Por su parte, Leo Heileman, director regional de ONU Medio Ambiente en América Latina y el Caribe, señaló que la misión busca abogar por la pronta recuperación de los ecosistemas afectados, “en especial de los cuerpos de agua de los que dependen las comunidades locales”.
La misión incluye a un equipo de Evaluación de Desastre y Coordinación de las Naciones Unidas (Undac) y estará compuesta por seis expertos de Reino Unido, Suecia, México, Guatemala, España y Francia.
El equipo espera presentar sus hallazgos y finalizar su visita a Colombia el 26 de abril.