A finales de los 90 y principios del 2000, la Liga Antioqueña de Sóftbol era reconocida en todo el país, porque aparte de los buenos manejos y la labor que se realizaba, el equipo femenino lograba destacar por sus buenas actuaciones, incluso era la base de la Selección Colombia en la disciplina.

En aquella época quien estaba al frente del equipo era el entrenador Guillermo Bonfante, un apasionado del deporte que contagiaba no sólo a sus jugadoras si no al público en general y que se acercaba a la liga con la intención de probar suerte en el sóftbol gracias al interés que despertaba la Selección Antioquia femenina.

Luego de muchos triunfos y alegrías, la época dorada llegó a su fin. Aparecieron terceros que no supieron continuar el camino y poco a poco todo lo bueno que se había hecho fue desapareciendo. Vino una seguidilla de cambios en los comités ejecutivos que estaban al frente de la liga y con ellos toda la fuerza económica que algún día existió, desapareció.

En la actualidad la realidad es preocupante, el presidente de la liga, Samuel Mejía, habló con El Mundo acerca del tema. “La liga estuvo sin dirección durante prácticamente todo el 2014, no se pudo hacer una elección oportuna del comité de reemplazo y sólo hasta el 28 de abril de 2015 pudo empezar a ejercer el comité como un ente con las condiciones que requiere”, explicó.

La flaqueza administrativa también ha repercutido en lo deportivo. La Selección Antioquia masculina no participa en un campeonato nacional desde el 2013 y el objetivo de la nueva dirigencia es lograr que el equipo participe en el Torneo Nacional el próximo año, que será clasificatorio para los Juegos Nacionales y si la Selección Antioquia no participa, serían otros cuatro años de ausencia en las máximas justas nacionales.

Por su parte, el equipo femenino ha sabido mantenerse a pesar de los problemas dirigenciales. En el año 2015 el equipo se quedó con el segundo puesto en los Juegos Nacionales llegando invicto hasta la final, en la que perdió con Bolívar, su eterno rival. Mientras que en 2016 la Selección Antioquia ocupó el segundo lugar en el Torneo Nacional, perdiendo en la final ante el mismo adversario.

“Este año estamos con los torneos, vamos bien en su desarrollo, la funcionalidad de la liga está fluyendo, se está trabajando con las selecciones y con los deportistas buscando mejorar, haciendo un trabajo más personalizado”, resaltó Samuel Mejía.

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Por eso el capítulo pendiente en la Liga de Sóftbol es buscar la recuperación del terreno perdido, con la ilusión de volver a tener equipos como los de la época dorada y sobre todo con la urgencia de replantear el tema económico, pues en la actualidad la nueva administración continúa lidiando con los errores que se cometieron en el pasado y un déficit de aproximadamente 180 millones que la tiene agonizando y frente a un futuro incierto.