"Yo siempre he usado los servicios del Inder y me parecen excelentes, pero este año y además de la reforma tributaria que nos exige pagar más impuestos, cerraron programas deportivos para los niños, limitaron cupos en patinaje y gimnasia, dejando a muchos  por fuera. Sé que es manejo del Gobierno y de la Administración que, mientras gana simpatizantes invirtiendo en la lucha contra la delincuencia, le quita fondos a la formación deportiva”.

Así se expresó Diana Leidy Castañeda, líder comunitaria de la ciudad. Como ella, varios ciudadanos han manifestado su descontento con los cambios y nuevos modelos que ha implementado el Instituto de Deportes y Recreación de Medellín (Inder) en algunos de sus programas. Uno de estos es el agrupamiento de la oferta institucional de cada sector en un sólo escenario, obviando los que por costumbre se habían utilizado para el desarrollo de actividades con la comunidad.

Asimismo, se informó que se hicieron cambios en los contratos de los formadores o docentes quienes imparten las clases en diversos escenarios de la ciudad. Según el testimonio de algunos de ellos, la intensidad horaria de sus labores fue aumentada de 15 horas semanales a 24, les solicitaron “impactar en más puntos” y que la disponibilidad  para el Inder fuera de tiempo completo.

De acuerdo a las hipótesis de la comunidad y de los mismos formadores, estos cambios obedecen a que el año anterior el Concejo de Medellín indicó que para el 2017 el presupuesto para el Inder habría de reducirse.

Entre tanto, Juan David Valderrama López, director del Instituto, había dicho desde inicios del 2016 que esa entidad descentralizada de la Alcaldía tenía un déficit de más de $48.000 millones para este cuatrienio, lo que obligaría a crear nuevas estructuras dentro de la organización.

 
"Hay una reducción sustancial, y en gran parte porque en la administración pasada el Inder ejecutó las Uva (Unidades de Vida Articulada), obras de infraestructura física de un costo importante que obviamente impactaban el presupuesto. Sin las Uva hay una diferencia en recursos de unos $12.000 millones anuales y esto nos obliga a repensarnos", informó el director a medios nacionales. 

Reducción en el presupuesto

En octubre de 2016 Orlando Uribe Villa, Secretario de Hacienda, y Cesar Augusto Hernández Correa, director  de Planeación, presentaron ante el Concejo Municipal el Presupuesto General de Medellín para el año 2017, en el cual se estableció que sería de $4,4 billones.

Igualmente, se indicó que en el Plan Operativo Anual de Inversiones se entregarían para el Inder $81.783 millones lo que representa el 2.25% del total del presupuesto. Entre tanto, el Concejo indicó que en el año 2016 se invirtió en el Instituto $131.000 millones “beneficiando a  241.362 personas con programas de deporte, recreación y actividad física en la ciudad”.
De acuerdo con las cifras presentadas en el presupuesto del Inder, para este año existe una reducción cercana a los $50.000 millones.

Algunas de las causas de la disminución en la inversión fueron presentadas por los concejales de la ciudad en una sesión plenaria realizada en noviembre del año pasado, un mes después de haberse aprobado el presupuesto. Durante esta reunión, los corporados aseguraron que se debían mejorar los procedimientos e invertir eficientemente los recursos del Inder.

Al respecto, el entonces concejal Normal Harry Posada, del Partido Centro Democrático, expresó su preocupación en la gestión del Inder durante el año 2016, dado que “no se evidenció claramente la inversión del dinero, pues en programas como las Escuelas Populares del Deporte y Medellín en Movimiento se observó que los recursos están disponibles pero no fueron ejecutados, dando como resultado comunidades a las cuales no llega la cobertura deportiva”. 

En los últimos doce años, el Inder atendió 555.000 personas y durante el año 2016 sólo se han impactado 250.000, la oferta de servicios a la ciudadanía en los diferentes programas ha disminuido significativamente, afirmó durante esa sesión el concejal.

“El Inder debe establecer las responsabilidades de su mantenimiento periódico para entregar escenarios acordes a las necesidades de los medellinenses, esta es la entidad más bella de la ciudad y por eso trabajaremos por su éxito, para que el impacto de los recursos, incluidos los de Presupuesto Participativo (PP), sea más eficiente y se invierta en adecuar las canchas y en los proyectos priorizados por la comunidad”, puntualizó el concejal Carlos Alberto Zuluaga Díaz.

Giovanny Rios Sarmiento, subdirector de Fomento Deportivo y Recreativo del Inder, confirmó  que la Administración había disminuido la inversión para el Instituto, lo que llevo a “repensarnos, a ser mas austeros en el presupuesto y a tener un poco mas de innovación y eso ha hecho que nosotros tengamos que modificar algunas formas con las que veníamos  funcionando”. Sin embargo, y a pesar del déficit de recursos, “nosotros creemos que le vamos a cumplir a la ciudad y le vamos a apostar a que la ciudad esté contenta con toda la oferta de deportes y recreación”.

Programas que se pierden y nuevas estrategias

En 2016, Juan David Valderrama López se había referido ya a la implementación de cambios en algunos programas del Inder. En ese entonces indicó que algunos de ellos iban a ser repotencializados pero, en general, los programas titulares continuarían. “Venimos con un aporte grande, muy novedoso, que está en el Plan de Desarrollo y que se definió con el alcalde”, subrayó.

Entre tanto, Ríos Sarmiento explicó que desde el inicio de 2017 se modificaron los modelos: “Teníamos dentro de la misma estrategia unos programas que se llamaban Nocturnos y Madrugadores y otros Aeróbicos Barriales, y todos los fusionamos en una sola estrategia que se llama Puntos Activos. Para ello hicimos un estudio al interior de la institución y nos dimos cuenta que teníamos que diversificar la oferta y lo que queríamos era llegar a otras poblaciones. De Alguna manera se ven afectadas algunas personas que ya venían participando tradicionalmente de nuestros grupos, pero también le dimos la oportunidad a otras personas de participar. El año anterior nosotros atendimos a 13.840 personas en esa estrategia y tenemos proyectado para este año impactar a 17.400, entonces el tema de que no vamos a atender algunas personas no es cierto, antes nos vamos a ampliar en el tema de la cobertura”.

“Nosotros llevamos muchos años con el programa que se llama Nocturnos y Madrugadores, teníamos clases los sábados y nos las quitaron y nos pusieron unos horarios para que nadie vaya. Nosotros sabemos que el Inder está haciendo cosas muy buenas y que hay programas nuevos con los niños y las madres gestantes pero nadie nos preguntó cuáles horarios nos quedan mejor ni si nos gustaba el programa, simplemente hicieron los cambios. Lo único que queremos es que nos dejen los programas como estaban”, dijo Gladis Correa, una habitante de 55 años del sector de Belén, quien indicó que desde hace por lo menos 35 años asiste a los escenarios deportivos de la ciudad y quien también ha sido participante frecuente de las clases que ofrece el Inder. 

A la par, una habitante del corregimiento de San Antonio de Prado también expresó su posición respecto a la situación y aseguró que “hasta el año pasado nos estaban dando deporte para adultos (balonmano) y este año ya nos salieron con que no nos van a mandar profesor  por que no hay presupuesto. Es injusto por que nos están haciendo mucho daño, por que esto para nosotros es vital para nuestra salud”.

Patricia Molina, habitante del barrio Santa Cruz, ubicado en la Comuna 2 de la ciudad, expresó que desde que inició el año, no ha llegado el formador de la clase de aeróbicos. “Este año no lo han mandado, esperamos que no nos quiten ese espacio para la comunidad, que lo necesitamos”. 

Los contratos de los formadores

Tanto el Inder como los docentes formadores confirmaron que se realizaron también modificaciones en el contrato laboral y aunque el subdirector del Inder indicó que por esta modificación no se han presentado renuncias, se conocieron casos en los que por las nuevas condiciones los formadores decidieron no renovar sus labores con el Instituto.

“Lo que hicimos fue equilibrar los honorarios y grupos a cargo, pero nosotros no tenemos ninguna renuncia, sólo tres formadores que no firmaron el contrato a la hora de comenzar a trabajar. Los formadores ya están llegando, estamos en un 95% de funcionamiento de la oferta y otra de las buenas noticias es que en los próximos días tendremos 20 formadores más que provienen de la Alcaldía”, precisó  Ríos Sarmiento.

Ignacio Aguirre (nombre cambiado a petición de la fuente) quien hacía parte del grupo de formadores del Inder, indicó que renunció por los cambios que le hicieron a los contratos laborales, entre ellos el aumento de horas de clase, así como los lugares a los cuales tiene que ir a dictarlas y la petición de disposición de tiempo completo. 

“Hasta el año pasado dictábamos un total de15 horas semanales de clase en cinco puntos diferentes, tres veces a la semana. Este año, de esas 15 horas las aumentaron a 24 horas y nos decían que necesitaban formadores que no tuvieran un compromiso adicional, es decir, con disponibilidad completa, pero con el mismo contrato de prestación de servicios. Se incrementaron nueve horas de trabajo y sólo nos aumentaron lo dispuesto por el Gobierno. Por ello, varios profesores han renunciado, no han visto la favorabilidad en los cambios y están recargados con los horarios”, dijo el formador.

De acuerdo con su carácter prioritario, esta situación fue llevada al Concejo el pasado 8 de marzo. Allí, los corporados solicitaron mayor asignación presupuestal al Inder para poder cumplir con su oferta institucional. “Se debe buscar una solución a la disminución de los programas y proyectos para la recreación y deporte, con el objetivo de mantener la cobertura y calidad de estos”, dijo el concejal Carlos Alberto Zuluaga Díaz.