Organismos internacionales, el Ministerio de Educación Nacional, las secretarías locales y demás entidades promueven cada vez más la implementación de la educación con enfoque diferencial.
En Colombia, de sus 49 millones de habitantes, el 25% vive en zonas rurales, el 30% son afrodescendientes o afrocolombianos, el 1% son indígenas, y 8.000 son gitanos. Además, el 5% se encuentra en situación de desplazamiento forzado, el 13% vive en zonas de frontera, el 7.5% son jóvenes y adultos mayores de 15 años que no saben leer y escribir, y el 10% presenta algún tipo de discapacidad.
De acuerdo con las Políticas del Ministerio de Educación Nacional, todos y cada uno de ellos son considerados como población vulnerable, lo que significa que el Estado también debe responder por las necesidades comunes y específicas de la población diversa geográfica y culturalmente y, entre esas necesidades, se destaca la educación. Por tanto, a partir del 2003, el Ministerio creó la educación diferencial con la Dirección de Poblaciones y Proyectos intersectoriales.
“Responder a las cosmogonías, expectativas, necesidades inmediatas y costumbres de cada una de estas poblaciones precisa de la consolidación de un sistema descentralizado, autónomo y coherente entre sus niveles, así como de modelos pedagógicos flexibles y pertinentes”, se explica en un apartado de un documento del Ministerio sobre modelos pedagógicos en el que se resalta la educación diferencial.
Precisamente, este modelo es uno de los que la Secretaría de Educación de Antioquia se ha encargado de promover durante la creación del Plan Decenal de Educación (Pnde) 2016-2026, con el que se busca obtener una política pública de Estado sobre la educación en Colombia para los próximos diez años.
“Como logros del 2016, que nos aportan y nos facilitan el camino para el 2017, tenemos la importancia que se le ha dado desde la Secretaría a los modelos de educación flexibles y diferenciales. Hemos sido promotores y venimos liderando en el Plan Decenal este propósito, lo que ha sorprendido al Ministerio”, indicó Néstor David Restrepo Bonnett, secretario de Educación de Antioquia.
Educación diferencial en Antioquia
Antes del 2008, en Antioquia se aplicaba el modelo de educación especial o escuelas especiales, lugares en donde se impartió formación a menores con características especiales. A partir de que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y otros organismos promovieran la educación diferencial, el Ministerio de Educación Nacional (MEN) acogió el modelo.
Gordon L. Porter, director de Iniciativas de Educación Inclusiva de la Asociación Canadiense para Vivir en Comunidad, y de la Comisión de Derechos Humanos de la provincia de New Brunswick, explicó que el modelo “significa que los niños con discapacidad y otras necesidades especiales son educados en aulas de clase con sus pares de edad, en las instituciones de su comunidad o vecindario. En otras palabras, ellos van al mismo colegio al que irían sus hermanos. Se les provee acceso a las mismas oportunidades de aprendizaje como a cualquier otro niño, y reciben un apoyo para que puedan cumplir metas individuales relevantes. Es decir, reciben la misma educación pero con enfoque prioritario sobre sus conductas, raíces y demás condiciones“.
Entre tanto, Gilma del Socorro Roldán Tabares, profesional universitaria e integrante del equipo de educación inclusiva de la Secretaría de Educación de Medellín, indicó que “la Secretaría tiene un proceso avanzado en el tema de educación diferencial. Nosotros venimos transformándonos de lo que ha sido la educación especial a la inclusión educativa. Todo esto implica un cambio conceptual de paradigmas y en las prácticas educativas”.
A la par, Dora Lucía Mejía Toro, otra de las integrantes del equipo de educación diferencial, expuso que la necesidad de pasar de la escuela especial a la educación diferencial se dio porque los niños, quienes estudiaban segregados, seguían siendo discriminados por su patología, catalogándolos como enfermos, o por su etnia y demás condiciones lo que les impedía el desarrollo como seres humanos independientes y sociables, que es en sí la función de la escuela.
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