El gobernador Luis Pérez anunció que la cárcel que está siendo construida en Yarumal entraría en funcionamiento en 30 días y tendría una capacidad de retener a dos mil reclusos. Esta estrategia fue decidida por la Administración departamental y la Alcaldía de Medellín, debido al alto hacinamiento que se ha registrado en las tres prisiones del Valle de Aburrá y la poca respuesta del mandatario nacional frente a estas problemáticas.

De este hecho, el mandatario antioqueño manifestó que será realizada con recursos de la región y que esta cárcel ubicada en el norte del departamento marcará un precedente para el sistema carcelario del país, además, explicó que en ella estarían las personas recluidas en las estaciones de Policía de Medellín.

La Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia, se pusieron de acuerdo para adquirir la propiedad y pagar cerca de 7.600 millones de pesos a la Diócesis de Sonsón-Rionegro, que era la propietaria del inmueble.

La secretaria de Gobierno departamental, Victoria Eugenia Ramírez Vélez, manifestó en una rendición de cuentas de la Asamblea de Antioquia que “hemos extremado nuestro interés en esta problemática y con satisfacción ya podemos anunciar como un hecho la compra del antiguo Seminario Mayor Cristo Sacerdote del municipio de Yarumal, en el que se construirá una granja penitenciaria. Es un paso importante en la búsqueda de aminorar la problemática, sin embargo este tema debe buscar soluciones de fondo desde el Gobierno nacional”.

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Dentro del discurso, el Gobierno aclaró que en las cárceles de Bellavista, Pedregal y en La Paz de Itagüí, el hacinamiento llegó al 650%. Tanto el alcalde como el gobernador han manifestado en ruedas de prensa y consejos de seguridad que se han tenido que liberar delincuentes porque no hay espacio para nuevos capturados.

La Policía informó a un medio de comunicación radial que varios presos se han fugado de las estaciones policiales, debido a que las condiciones de seguridad son bajas, ya que los lugares están diseñados para que los capturados permanezcan menos de 72 horas allí. Sin embargo, algunos llevan tres meses en los recintos. La misma situación se presenta en el búnker de la Fiscalía, donde hay cerca de 100 personas sindicadas en distintos actos delictivos.

El gobernador Pérez Gutiérrez y el Ministro de Justicia, Enrique Gil Botero, finiquitaron el acuerdo que busca crear un nuevo modelo carcelario en el que los reclusos tendrán que estudiar y trabajar.

Por su parte, el diputado Saúl Úsuga, atendiendo la urgencia de la situación, ya había planteado que se han presentado propuestas de estrategias de prevención y reformas que permitan la excarcelación de delitos menores, argumentando que más de 4.000 reclusos en cárceles de Antioquia están presos por hurto y más de 1.700 por microtráfico, delitos que en algunos casos, para este corporado, podrían no tener cárcel.