Aunque la estatal petrolera asegura que está laborando para remediar los impactos del brote de crudo, la comunidad no se siente satisfecha con las acciones y por eso interpusieron el recurso jurídico.
Ecopetrol anunció a través de su cuenta en Twitter que continúan los trabajos para remediar la afectación ambiental causada por el derrame de crudo en la quebrada La Lizama, ubicada en zona rural de Barrancabermeja. Las labores de contingencia no han sido lo suficientemente contundentes para los lugareños, inconformismo que motivó la redacción de una tutela para dar un ultimátum a la empresa y obligarla a reparar definitivamente el daño ecológico.
La petrolera aseguró que su prioridad es “rescatar, atender y regresar a su hábitat natural a la fauna afectada”. De acuerdo con la compañía, hasta el momento se han recuperado a más de 1.230 animales, entre peces, anfibios y aves.
“Hemos estado en el sitio donde está la emanación de crudo y es realmente impresionante. Sin embargo debemos reconocer que Ecopetrol tiene plenamente controlado el vertimiento a las fuentes hídricas”, declaró el decano de la Escuela de Ingenierías Fisicoquímicas de la Universidad Industrial de Santander, Dionisio Laverde.
Agregó que la petrolera también ha desplazado un grupo de al menos 400 personas que están afrontando la contingencia y “han desplegado una gran cantidad de equipos y material para trabajar de una manera permanente”.
La Sociedad petrolífera ya había precisado que se encontraba laborando para recuperar los afluentes directamente impactados por el bote de hidrocarburo, según difundió en redes sociales, los equipos encargados de atender la emergencia están trabajando 24 horas en la situación.
“Instalamos barreras de contención y activamos cuadrillas de recolección. 35 camiones de vacío, 14 volquetas, 9 retroexcavadoras, 29 tracto camiones y 13 turbos están dedicados a la contención”, sostuvo Ecopetrol.
También, la petrolera comunicó que está monitorizando permanentemente la zona afectada y, además, toma muestras de manera continua que son enviadas a los laboratorios para determinar el estado del agua alcanzada por el hidrocarburo.
Por su parte, el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Murillo, exigió a Ecopetrol que acelere las labores de reparación y que incremente su capacidad para responder a la emergencia.
Según el jefe del gabinete, la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla), ya procedió a abrir la investigación del caso y estableció unas medidas que debe cumplir la Empresa Colombiana de Petróleo.
Así mismo, Murillo dijo que ya cuentan con el respaldo que les ha ofrecido el Instituto Von Humboldt, que acompañará en la restauración de los ecosistemas golpeados por derrame de crudo.
“Vamos a pedir también el acompañamiento de la Procuraduría General de la Nación y de la Fiscalía, para que muy prontamente se puedan hacer las investigaciones y para que se pueda encontrar la causa de este fenómeno y a los responsables”, advirtió el ministro.
No obstante, las acciones adelantadas por Ecopetrol y las autoridades no han sido suficientes para la comunidad, por eso, el diputado santandereano Mario Cárdenas y el estudiante de derecho Danil Román Velandia instauraron una acción de tutela en contra de la empresa estatal de petróleo.
El Juzgado Cuarto Laboral del Circuito de Bucaramanga la admitió y ordenó a las entidades, a más tardar este lunes 26 de marzo, contener definitivamente la salida del crudo.
"Si este lunes no ha parado el petróleo entonces interpondremos un desacato ante el despacho judicial. El Ministro de Ambiente ha estado muy déspota en este tema porque no ha dado una solución de fondo", señaló el estudiante.
La tutela además ordena compensar de manera inmediata la fauna y la flora, así como las comunidades afectadas en la Fortuna.