Dos militares ecuatorianos resultaron heridos de bala en un enfrentamiento registrado en la provincia costera de Esmeraldas, frontera con Colombia, informaron este martes fuentes del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ecuatorianas.

"Son dos soldados heridos de bala, uno en la pierna y otro en la columna, se encuentran en situación estable y en una casa de salud militar", reveló la fuente de la Dirección de Comunicación del Comando Conjunto.

Precisó que el tiroteo ocurrió el lunes en el sector conocido como El Pan, en el cantón de San Lorenzo, cuando los uniformados realizaban una patrulla de rutina a lo largo de la zona fronteriza.

"La patrulla fue atacada por un grupo de personas no identificadas, cuya identidad deberán determinar las investigaciones", agregó la fuente militar.

El suceso se inició presuntamente por el lanzamiento de proyectiles de mortero contra los agentes ecuatorianos, que respondieron hacia el origen del fuego con munición real y fueron tiroteados desde el otro lado de la frontera, explicó.

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El de ayer no fue un caso aislado, sino que desde el sábado se vienen produciendo incidentes armados en la zona, en particular el domingo y lunes cuando hubo "varios enfrentamientos y detonaciones de mortero" a lo largo de la demarcación con Colombia, señaló la responsable militar.

El sábado se registró un intercambio de fuego contra una patrulla del Ejército ecuatoriano, que en este caso, no dejó heridos pero sí un detenido.

El titular de Defensa ecuatoriano, Patricio Zambrano, atribuyó los últimos disparos a cultivadores de coca en el territorio colombiano y señaló que su país no tiene ese tipo de cultivos, informaron medios locales.

El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador ha precisado que las acciones militares de protección en la zona limítrofe responden al decreto de estado de excepción en vigencia desde finales de enero en los sectores de San Lorenzo y Eloy Alfaro.

Esa medida siguió a un atentado con carro bomba contra una comisaría de Policía en San Lorenzo, que causó 28 heridos leves y 37 casas afectadas por la deflagración del explosivo empleado.

La agresión fue calificada por el presidente del país, Lenín Moreno, como "acto terrorista" ligado a "bandas de narcotraficantes golpeadas por las fuerzas de seguridad del Estado ecuatoriano".

Colombia y Ecuador acordaron la semana pasada reforzar la seguridad de su frontera común con 10.000 nuevos efectivos para neutralizar las acciones violentas y garantizar la seguridad de la población de la zona de confluencia.

Una fuente ecuatoriana de seguridad de alto rango denunció que antes del despliegue de tropas, las fuerzas colombianas se encontraban a varios kilómetros de la zona limítrofe, que abarca más de 580 kilómetros de divisoria, y realizaban patrullajes puntuales para retirarse a sus bases dejando el área a la suerte de narcotraficantes y bandas armadas.