Según la Organización Mundial de la Salud, entre 2000 y 2050, la proporción de los habitantes del planeta mayores de 60 años se duplicará, pasando del 11% al 22% y Colombia no es ajena a esta tendencia de envejecimiento acelerado, pues mientras en 1951 la mayoría de la población en el país tenía entre 0 y 25 años, para el 2010, el porcentaje de personas mayores de 40 años aumentó.

Cifras de proyección del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) indicaron que en Medellín hay 483.880 habitantes mayores de 60 años, de los cuales sólo 350.000, aproximadamente, reciben subsidios de los programas de la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos; y del Estado, puesto que, según los datos del Sisbén, se encuentran en extrema pobreza.

Precisamente, la situación del aumento de esta población y la alta demanda para la atención de la misma, que en su mayoría está en situación de abandono o en condición de habitante de calle, como lo ha confirmado la Alcaldía, obligó a que se aumentaran los esfuerzos para suplir las necesidades de estos adultos mayores y fortalecer la implementación de programas tales como: Dormitorio, la Colonia Belencito y la Red de Hogares nocturnos y de larga instancia, que el año pasado atendieron a 4.000 personas.

Entre tanto, Catalina Arboleda Goez, directora técnica del Equipo de Personas Mayores de la Secretaría de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, afirmó que en la ciudad se están desarrollando proyectos, dentro de la política pública, que acogen a esta población para mejorar su calidad de vida y mitigar los problemas de pobreza, exclusión y de salud. Uno de ellos es Por un envejecimiento y una vejez digna, que quedó aprobado en el Plan de Desarrollo de Medellín 2016-2019. Dentro de este se desarrollan tres proyectos: dos están relacionados con la atención a personas mayores y uno es para la promoción del envejecimiento activo y la atención y acompañamiento para las personas mayores vulnerables. 

“Es claro que nosotros hoy no tenemos cómo darle un cubrimiento total a la demanda que se tiene.  El año pasado recibimos más de 700 solicitudes de inclusión en los servicios de atención. Nosotros iniciamos derivando esa solicitud al equipo psicosocial, estas personas realizan la visita y después el resultado de esa visita pasa al comité de análisis psicosocial, que indica el procedimiento a seguir o qué oferta se les puede ofrecer”, indicó Arboleda Goez.

A la par, Luis Bernardo Vélez, secretario de Inclusión Social, explicó que a través de otro programa, denominado Volver a Casa, se le está apostando a que los adultos mayores que fueron abandonados retornen a sus hogares.