Interesante pregunta para un ser humano que a duras penas puede hacer las operaciones básicas (o sea, yo).
“¡Que viva la niña!”: Esto equivale a “¡(yo quiero) que viva la niña!”. Es una expresión de deseo.
“¡Qué viva la niña!”: Estamos afirmando que la niña es viva, pero lo decimos con más fuerza, exclamando. “Qué (tan) viva (es) la niña”.
Con este párrafo terminé la columna de la semana pasada. Sigamos con la explicación.
Lea también: Qué mala noticia o ¡qué mala noticia!
¿Sienten la diferencia entre “qué viva” y “que viva”? La pronunciación no es igual (repítanlo mentalmente), hay una diferencia pequeña, pero diferencia al fin de cuentas.
También hay preguntas en las cuales “que, cuando, como”, etc., no se tildan. Piénsenlo así: no llevan el tono de la pregunta, sino que, simplemente, unen una idea con la otra. Por ejemplo: “¿Que no estás bien?, le preguntó Jairo”. Jairo preguntó “¿(cómo así) que no estás bien?”. Como ven, “que” no se pronuncia con fuerza y simplemente está enlazando dos oraciones. Creo, no sé ustedes, que la manera más sencilla de percibir la diferencia es pronunciando: “¿Qué hiciste?” y “¿que no fuiste?, le preguntó su papá cuando lo vio en casa en pleno día de estudio”. La segunda, completa, sería posiblemente “¿(cómo así) que no fuiste?”.
¿Matemáticas o matemática?
Interesante pregunta para un ser humano que a duras penas puede hacer las operaciones básicas (o sea, yo). La “ciencia deductiva que estudia las propiedades de los entes abstractos, como números, figuras geométricas o símbolos, y sus relaciones” se puede llamar matemática o matemáticas. “Me gusta la matemática” o “me gustan las matemáticas”, por lo tanto, son correctas.
Ahora, es más frecuente “las matemáticas”, pero no por ello más adecuada.
Aprovecho para contarles esto: los nombres de asignaturas (o materias, como también se llaman) se escriben con mayúscula. Por lo tanto, “hoy tengo mi clase de Matemáticas/Matemática”. Como el curso se llama Matemáticas, se escribe con mayúscula. Otro cuento es decir “me encantan las matemáticas/la matemática”, porque, en este caso, no me refiero a una asignatura, sino a la ciencia, ¿ven la diferencia?
Si, supongamos, el nombre es muy largo, solo la primera palabra llevará su mayúscula: “Introducción a la historia de la matemática y la geometría”, por decir cualquier cosa. Además, se debe delimitar con comillas (cuando es largo) para evitar confusiones.
Además: Palabras raras y la tilde de “río”
De esas que casi nunca usamos:
Fetiche. Es un objeto al que se le atribuyen poderes sobrenaturales. Se refiere especialmente a los ídolos de las culturas primitivas. Ahora bien, hoy es más frecuente el uso de esta palabra para referirnos al sexo. Un fetiche puede ser, en este contexto, una prenda de vestir que cause excitación o ayude a alcanzar el orgasmo. A este “gusto” por un objeto en el acto sexual se le llama, por esto, fetichismo.