El patrullero de la Policía colombiana Wilmer Antonio Alarcón Vargas fue condenado por un juez de Bogotá a 37 años y seis meses de cárcel como autor del homicidio del grafitero Diego Felipe Becerra ocurrido en agosto del 2011, informó hoy la Fiscalía.
El Juzgado 33 Penal de Bogotá sentenció al patrullero Alarcón por ser el "autor del delito de homicidio en circunstancias de agravación, por ser cometido en estado de indefensión en contra de un menor de edad", añadió el ente acusador en un comunicado.
Alarcón fue vinculado al proceso, pero fue puesto en libertad en agosto del año pasado y desde entonces no ha vuelto a comparecer por lo que en la sentencia se reitera la orden de captura para hacer efectiva la condena.
Becerra murió el 19 de agosto de 2011 en el sector del barrio Pontevedra, en el norte de Bogotá, en donde un grupo de policías perseguía a unos ladrones.
Al mismo tiempo, unos grafiteros, que pintaban una pared en ese lugar, corrieron porque creyeron que los uniformados les quitarían los aerosoles y otros elementos con los que dibujaban.
Inicialmente, la Policía señaló a Becerra de ser un delincuente, aunque la familia del gratifero interpuso una querella y en el juicio se logró probar que Diego Felipe Becerra fue víctima de un montaje por parte de la Policía.
Esta es la cuarta condena contra agentes de la Policía de Bogotá por el homicidio del grafitero.
Los agentes Nelson Rodríguez, Fredy Navarrete, Nelson Tovar, fueron condenados por la manipulación de la escena del crimen, y Wilmer Alarcón como responsable de disparar contra Becerra.